La patronal autonómica Confecomerç apunta a un cierre de año con golpe en la rentabilidad del sector debido a una menor demanda en un momento en el que los costes «siguen estando altos»
El pequeño y mediano comercio valenciano lanza una alerta. La segunda parte del año va a ser más complicada para el sector, con una caída de ventas y de rentabilidad motivada por un lado por la menor afluencia de clientes debido al final de los ahorros y, por otro, por un contexto económico en el que la presión de los costes no ha aflojado. Ese es el horizonte que ha dibujado esta mañana Rafael Torres, presidente de Confecomerç -entidad del pequeño y mediano comercio englobada dentro de la patronal CEV-, durante el acto de presentación de su campaña «El principio de los principios. El buen comprar».
Ante los medios, el dirigente ha remarcado que «llevamos dos trimestres de bajada de consumo interno», un asunto que resulta «preocupante» porque pese a que «las cifras macro indican que todo va muy bien», la realidad «no es esa». «Seguimos sufriendo el alza de costes», ha insistido Torres, antes de apuntar que se tienen «problemas de demanda que nos van a llevar a un escenario que en el segundo semestre en ventas no va a ser mejor que el primero, que tampoco ha sido bueno».
Peor en el pequeño comercio
«Las grandes cadenas están funcionando mejor y los comercios unilocalizados son los que más están sufriendo», ha añadido el representante de Confecomerç antes señalar que en último año en España hasta 20.000 autónomos han decidido cesar su actividad «y muchos de esos son en el comercio».
Y es que a pesar de que en el verano «se está hablando de crecer un 5-6 % sobre el año pasado en ventas», este alza con un entorno de inflación -continua- «resulta exiguo». «El consumo ha ido a menos y va a seguir bajando«, ya que en Navidad o en los primeros meses de 2023, «la gente ha tirado de ahorro y este ahora ya se ha acabado». En cuanto al impacto de los visitantes internacionales de cara a esta temporada estival que se prevé de récord, Torres ha señalado que «podría reflotar» un poco las previsiones debido a que viene «con capacidad adquisitiva», aunque sobre todo sucederá en aquellas localidades de costa o en ciudades como València, «más beneficiadas por el turismo».
Lucha contra las plataformas
Por otro lado, Torres también ha enfatizado que la presidencia de España en la Unión Europea debe servir para poner encima de la mesa que «todos juguemos con las mismas armas». En alusión a las ventajas fiscales y normativas que tienen las grandes plataformas digitales sobre el gran, mediano o pequeño comercio, el dirigente ha remarcado que sus negocios cuentan con una «sobreregulación» frente a la «infraregulación» del comercio online. «Queremos competir de tú a tú, con las mismas reglas, que no haya una discrimación positiva al más fuerte como está pasando», ha concluido.
«Es una campaña en positivo, donde buscamos reflejar lo bueno y concienciar haciendo reflexionar sobre los hábitos de compra», ha señalado el dirigente, antes de remarcar que el objetivo pasa por «contribuir a que la economía cercana crezca sin dañar el planeta». En este sentido, ha valorado la trascendencia de trabajar con gobiernos, diputaciones y ayuntamientos… para que se reconozca «el sector como estratégico y su importancia en el empleo».
La campaña, que cuenta con un vídeo continuista con el del año pasado, está en castellano y en valenciano. Además, a ella se han unido más de 100 asociaciones, gremios y entidades ligadas a Confecomerç y se han imprimido 8.500 carteles, todo con el objetivo de «refrescar los valores».
Fuente: levante emv
